Si padeces dolor de espalda, necesitarás recurrir a una consulta médica y a partir de un diagnóstico, tu médico te indicará remedios para el lumbago.
La medicación que te indicará formará parte de un tratamiento específico de acuerdo a tu caso particular, ya que es probable que necesites en conjunto fisioterapia para poder encontrar una solución definitiva a tus dolores, pues también como cambios de hábito puede sugerirte colchones para el dolor de espalda, pues dependiendo del colchón que te encuentres usando responderá a la aparición de dolores al levantarte de dormir. También deberá investigar tus hábitos cotidianos con el objetivo de conocer su causa.
A su vez como remedios para el dolor de espalda y de venta libre tienes a tu disposición el paracetamol. Se trata de un analgésico que te ayudará a aliviar el dolor pero la inflamación provocada por la lumbalgia no la solucionará.
Para reducir la inflamación necesitarás antiinflamatorios no esteroides como el Ibuprofeno o la aspirina, pues estos remedios cuentan con acción sobre la inflamación y a su vez calman el dolor.
Luego con prescripción médica te puede indicar un relajante muscular, pues si se trata de un dolor crónico te ayudará a reducir la contractura si es que sufres de contractura muscular.
Los antidepresivos también necesitan prescripción médica, pues ejercen un bloqueo a nivel cerebral impidiendo la aparición del dolor y por otro lado estimulan la producción de endorfinas con lo cual ejercen una acción calmante.
También bajo prescripción médica y en casos de dolor excesivo, otra opción son los opiáceos como la codeína y la morfina.
Como antiinfamatorio potente, las infiltraciones en la columna con inyecciones epidurales de esteroides llegan a la raíz del nervio controlando el dolor.
Como inyecciones, el médico te puede indicar las espinales, éstas actúan sobre los nervios controlando el dolor o la intraarticular en el caso de que se trate de una inflamación de las articulaciones facetarias que ayudan a mantener la estabilidad y ayudan al movimiento. Al inflamarse provocan dolor, pues a partir de una inyección intraarticular al adormecer la articulación el dolor se reduce.
Si tu médico te indicó un remedio bajo prescripción médico nunca lo combines con otro de venta libre sin su consentimiento.
En el caso de que estés buscando un remedio natural antiinflamatorio, puedes elaborar una infusión de cola de caballo, orégano y tomillo.
Necesitas medio litro de agua, una pizca de tomillo, una pizca de cola de caballo y una pizca de orégano.
Una vez que reuniste los ingredientes, colocarás el medio litro de agua a fuego lento par hervir las hierbas durante cinco minutos. Luego dejarás que repose unos diez minutos par colar la preparación y beberla en tres tazas durante el día antes de las comidas.
Si eres afín a la medicina natural también puedes preparar un emplasto de col y arcilla con 3 hojas de col, un litro de agua mineral, medio kilo de polvo de arcilla y tres cucharadas de vinagre de manzana. Colocarás en un bol el polvo de arcilla para mezclarlo con el agua hasta que se haya formado una pasta y luego le agregarás el vinagre de manzana. Después dejarás la mezcla en reposo. Usarás el emplasto colocándote una capa de dos o tres centímetros de la arcilla sobre la zona dolorida, luego la taparás con las hojas de col y las sujetarás con un paño durante doce horas como otro de los remedios para el lumbago.
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